Cuando estaba preparando la habitación
de la Mona, una de mis amigas me aconsejó que colocará algunos detalles a su
altura para que ella pudiera participar de su habitación desde muy pequeñita. Recordando
esta recomendación, cuando la Mona comenzó a ir a la guardería y a traer sus
pequeñas creaciones, decidí hacer un mural para que pudiera colocar y jugar a
su antojo con las manualidades que traía de la guardería y fue un éxito porque
a la Mona le encanta jugar con su mural, poner y quitar sus cositas; es cierto que algunas duran dos días porque las destroza en
un rato, pero son suyas y son para que se entretenga con ellas, también le he
puesto alguna foto de familia y le encantan. Además, la Mona no suele meterse cosas en la boca, sí despega algún velcro me lo da o lo vuelve a pegar, pero si tu peque acostumbra a meterse todo en la boca espera a que sea un poquito mayor para ponerle el mural.
En un principio lo hice muy sencillo,
simplemente coloque varios trozos de velcro a la pieza de fieltro y lo pegué a
la pared utilizando el adhesivo del velcro, por lo que si no quieres
complicarte esta es una opción. Luego decidí recortar un poco los bordes y más
tarde poner su nombre utilizando fieltros de colores.
La idea es muy sencilla, simplemente
necesitas:
- Una pieza
de fieltro de 80cm x 50cm.
- Tijeras
y rotulador para marcar.
- Pequeñas
piezas de fieltro de colores.
- Velcro
adhesivo (sólo utilizarás la parte áspera).
1º Recorta los bordes de la pieza de
fieltro grande, yo les he dado una forma redondeada, pero puedes darles la
forma que se te ocurra.
2º Corta pequeños trozos de velcro y colócalos
por la parte áspera en la pieza de fieltro, de forma que la parte adhesiva quede
hacia fuera para luego pegar el mural en la pared.
3º Coloca el mural en la pared a la
altura de tu peque.
4º Con un rotulador dibuja las letras
del nombre sobre los fieltros de colores y recorta.
5º Pega un pequeño trozo de velcro (por la parte adhesiva) en cada letra, de forma que luego puedas colocar las
letras sobre el mural de fieltro y queden enganchadas con la parte áspera del
velcro.
6º Pega un pequeño trozo de velcro adhesivo
en cada una de los objetos que quieras colocar en el mural. Recuerda que los
trozos de velcro deben ser pequeñitos para que se peguen y despeguen fácilmente
del mural, por lo que si tu peque es de los que se mete todo en la boca igual es buena idea que esperes un poco antes de ponerle el mural.
Ya ves que es súper sencillo y queda fenomenal, así que !anímate y diy!
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